Como todas las historias de empresas familiares en Argentina, esta tiene su origen en manos de su principal protagonista, don Emilio R. Reula.
Nacido en el seno de una familia trabajadora del interior de Entre Ríos, precisamente en el paraje Don Cristóbal II, perteneciente al departamento Nogoyá, don Emilio curso sus estudios primarios en la escuela primaria Manuel Belgrano (Ex Escuela Nacional 60) de la citada comunidad, para luego trasladarse, gracias al esfuerzo de sus padres, a la ciudad de Nogoyá donde cursaría sus estudios secundarios.
Luego de haber transitado por diferentes trabajos (vareador de caballos, lava copas, ayudante de veterinaria, entre otros) don Emilio logra establecerse en Villa Elisa, donde entra a trabajar en el Banco de Entre Ríos (por aquel entonces sociedad del estado provincial), al poco tiempo de mudarse allí, volvería una vez más a Nogoyá para contraer matrimonio con quien sería su compañera para toda la vida, doña Violeta Beatriz Enrique, oriunda de dicha ciudad.
Gracias a una vuelta del destino, le es conferida una calculadora Olivetti para que le entregase a un conocido cliente del banco en horas de la tarde, dicha transacción despertó su lado comercial y decidió involucrarse aún más en la venta de máquinas de oficina. Para tal objetivo se muda con su familia a la ciudad de Concepción del Uruguay donde comienza a trabajar para la firma CAMIL AMED, por aquel entonces representante de la firma OLIVETTI Argentina, tradicional marca de máquinas de oficina (calculadoras, máquinas de escribir, etc).
Con el correr de los años y con un bagaje de experiencia, decide independizarse y el 1 de Junio de 1982 forma la empresa CENTROFICINA Equipamiento, cuyo primer local se encontraba en la ciudad de Crespo, departamento capital Paraná. No fueron menores los inconvenientes que se le presentaron a don Emilio, pero gracias a su determinación, logró suplirlos a todos y cada uno de ellos, lo cual le llevo a abrir su primer local en la ciudad de Paraná, en Octubre de 1986, a tan solo 4 años de abrir su primer local, ya contaba con una sede en dicha capital provincial, ubicada inicialmente en Gualeguaychú 775 (actualmente ESCO).
Su expansión comercial lo llevo a trascender las fronteras provinciales y llegar a toda la provincia de Corrientes y posteriormente a la provincia de Misiones.
Para fortalecer dicha expansión, don Emilio inaugura su primer local (propio) en la ciudad de Paraná, que se convertiría en la Sede Central de la empresa, en la calle Gualeguaychú 290 (anteriormente allí se encontraba el depósito de la firma Galperin), haciendo un local completamente desde cero, con modernas instalaciones que fueron el motivo principal del empuje que llevara a la firma a tener luego sedes en Concordia (Entre Ríos), Goya (Corrientes), y hasta llegar a la ciudad de Posadas, donde existe actualmente la sede en la calle Lavalle (edificio también propio, construido acorde a las necesidades de la empresa y del crecimiento que dicha plaza ameritaba).
De la mano de grandes marcas, y con una sólida trayectoria forjada en el común beneficio forja sólidas alianzas con marcas como TEMPO, Industrias Solano, Portantino, Cia HASAR SAIC, Olivetti (hasta su partida en el año 2001), KRETZ, SYSTEL, MORETTI, Hunter Douglas, entre otras marcas de renombre nacional e internacional.
De la mano de un mercado más exigente cada día más en calidad, buen precio y excelente atención es que ya con la intervención de los nuevos integrantes de la familia, la empresa comienza a importar equipamientos de oficina, entre otras soluciones de almacenamiento (muebles y estanterías metálicas), en base a diferentes viajes a la República de China, forjando lazos comerciales con firmas de alta experticia en el campo de dichos rubros.
Aunado a todo ello, y con el objetivo siempre en estar comprometidos en lograr la eficiencia de sus clientes, con las premisas forjadas por don Emilio en cada transacción: .Honestidad, Sinceridad y Profesionalismo, bases que conformaron el crecimiento de CENTROFICINA y que apuntalan la expansión hacia nuevos mercados y nuevos rubros en desarrollo.
Aquel humilde joven nacido en el pequeño paraje de Don Cristóbal II, es la fuente de inspiración de las nuevas generaciones, y el inagotable motor que ha provisto de una visión y un empuje que solo aquellas personas con un claro objetivo de superación, y un arraigado cariño y pasión por lo que hace, desde el más pequeño de los detalles, hasta la más grande de sus obras.
CENTROFICINA lleva ese espíritu embebido en cada uno de sus logros, poniendo el mismo énfasis en cada uno de sus negocios, con compromiso y calidad.